Empleados administrativos expresan su descontento ante la decisión de extender la jornada laboral a nueve horas diarias, medida considerada innecesaria y abusiva.
La Alcaldía de Santo Domingo Este (ASDE) enfrenta una creciente polémica luego de que la nueva administración, liderada por el alcalde Dío Astacio, dispusiera un aumento de la jornada laboral para los empleados administrativos a nueve horas diarias. Esta medida, que ha generado una ola de inconformidad entre los trabajadores, fue comunicada oficialmente a través de una circular emitida el pasado 23 de mayo.
La circular, firmada por la Licenciada Sadia O. Matos, Directora de Gestión Humana, informaba a los empleados del cambio de horario institucional aprobado por el Concejo de Regidores el 26 de abril, en el marco de la declaración de un "período de urgencia" que otorgaba a la alcaldía un fondo adicional de 280 millones de pesos para los primeros 100 días de gestión.
Según el documento, a partir de la declaratoria de emergencia, todos los empleados administrativos deberán trabajar de 8:00 de la mañana a 5:00 de la tarde, lo que implica una jornada laboral de nueve horas diarias, en lugar de las ocho horas establecidas por la ley. Además, los encargados departamentales tendrán que cumplir con una jornada de once horas diarias, desde las 8:00 de la mañana hasta las 7:00 de la noche.
Esta decisión ha sido fuertemente criticada por los empleados de la alcaldía, quienes consideran la medida como abusiva e innecesaria. Cinthia Polanco, en declaraciones a Ciudad Oriental, señaló que varios trabajadores ven en este cambio una forma de presión para que renuncien a sus puestos de trabajo voluntariamente, evitando así un escándalo masivo de cancelaciones.
La legalidad de esta medida ha sido cuestionada por expertos en temas laborales, quienes han indicado que, aunque la modificación podría ser legal si ha sido informada a la Secretaría de Estado de Administración Pública, como lo establece el Decreto No. 523-09, su implementación abrupta y sin consenso ha generado malestar entre los empleados.
Este decreto regula las relaciones laborales en el sector público desde 2009 y estipula en su Artículo 27 que la jornada semanal de trabajo no debe ser inferior a 30 horas ni superior a 40 horas. Cualquier modificación que implique una jornada superior debe ser dispuesta por el titular del órgano correspondiente e informada a la Secretaría de Estado de Administración Pública, en atención a situaciones especiales e intereses de los órganos.
Sin embargo, para muchos de los afectados, la extensión de la jornada laboral no se justifica como una necesidad operativa, sino como una estrategia para inducir renuncias sin recurrir a despidos directos. Esta percepción ha alimentado el descontento y la desconfianza hacia la nueva administración de la ASDE.
El medio Ciudad Oriental intentó confirmar de manera independiente si la declaratoria de urgencia aprobada por el Concejo de Regidores incluía efectivamente el aumento de la jornada laboral, pero no obtuvo una respuesta clara. Esta falta de transparencia solo ha contribuido a intensificar las críticas y el escepticismo entre los trabajadores y la comunidad en general.
La situación plantea preguntas importantes sobre la gestión de recursos humanos en el sector público y la necesidad de un equilibrio entre la eficiencia administrativa y el respeto por los derechos laborales de los empleados. ¿Será esta medida realmente necesaria para el funcionamiento de la alcaldía, o es simplemente una táctica para reestructurar la plantilla de personal sin enfrentar el escrutinio público?
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